Brujas Brujas, me pareció una ciudad encantada, de esas que uno solo ve en los cuentos de princesas e historias de caballeros, un lugar para perderse entre los canales y la edificación, sus cafés y la gente, la grand place, la Grote Markt, los canales, el Begijnhoof, la plaza del ayuntamiento y la basílica de la Santa Sangre, en fin, cualquiera de sus callejuelas, iglesias y monumentos son impresionantes. Todo lo recuerdo al estilo medieval y hay numerosos centros religiosos, callejuelas y canales por los que navegar. Lo primero que vi al salir de la estación fue un parking de bicicleta, y no me refiero a uno pequeños sino que había cientos de bicicletas aparcadas. El uso de la bicicleta está bastante extendido por esta zona y es un elemento a utilizar para visitar la ciudad si no te apetece caminar o pasear en barco, lancho o carruaje de caballos. Una que nunca aprendió a montar en bicicleta prefirió caminar y seguir a los turistas para no perderse y llegar al centro de la pobla
Destinos errantes: Berbe en movimiento (viajes, escapadas, visitas, recreaciones, etc.)