Mdina Tomando el bus 65 la última parada es Mdina, el autobús para justo en la plaza frente a la puerta a la ciudad. Se encuentra toda amurallada y la llamada la ciudad del silencio, por sus calles no suelen pasar coches, solo los que tienen permiso expreso, que son pocos, y lo que se ve son turistas paseando y coches de caballos. Así que pasear por algunas de sus calles, limpias y conservadas da sentido a pasear por la ciudad del silencio y lo recomendable. Nada más cruzar las murallas y la puerta de la ciudad, esta la oficina de turismo, pero no hay pérdida, la ciudad está toda amurallada y no es demasiado grande, todo recto se acaba pasando por la catedral. que resalta porque todas las casas están cuidadas, sus balcones y fachadas remontan a otra época y de repente en la plaza de la catedral y cabina de teléfono roja, típicamente británica, recuerdo del paso colonial del país. Aquí, como en otros sitios, había exposiciones de semana santa gratuitas. Son muy católicos y realmente
Destinos errantes: Berbe en movimiento (viajes, escapadas, visitas, recreaciones, etc.)