Belén El tema de que Palestina, al igual que otros lugares, no esté reconocida por todos los países del mundo consigue que no aparezca como tal en el circuito. Pero el guía nos avisa que llevemos los pasaportes porque al regreso puede que nos lo pidan (esta es una de las cosas que jamás he entendido cuando viaje, cómo la gente puede pasear indocumentada por un país extranjero, luego que pasan cosas, en fin). Salimos de Jerusalén camino a Belén y antes de entrar nos encontramos con un muro de cemento y en lo alto una alambrad ay un control militar donde nos dejan pasar sin problemas (somos un autobús lleno de turistas), en cuanto entramos a Belén se pueden ver varios edificios desperdigados por los montes. Aquí hace más fresco así que busco rincones que protejan el viento frío que llega, aunque hace una tarde soleada. Comemos en Belén y lo primero que me doy cuenta es que es más barato que Israel, aunque usan la misma moneda. Tras la comida y las compras obligadas del circuito n
Destinos errantes: Berbe en movimiento (viajes, escapadas, visitas, recreaciones, etc.)