Hospital St. Cross, Winchester - Inglaterra

Hospital St. Cross

Después de comer salimos en dos grupos para visitar el Hospital con guía, aunque se puede hacer por libre comprando el billete de entrada. No todas las partes del Hospital son visitables dado que todavía funciona como hospicio y llevado por la orden de los hermanos, por lo que esas zonas están prohibidas a las visitas. Keats describió St Cross como ‘un lugar muy antiguo interesante, tanto por su torre gótica y limosnas cuadradas, como la apropiación de las ricas rentas del obispo de Winchester "(una referencia a un actual escándalo de corrupción). Nada más entrar en la zona del Hospital está la casa que se usa como cafetería y un arco de entrada donde está la boletería. Aquí me cambié de grupo, no fue planeado pero había comido con James y Oxana en el jardín y salimos a la vez, por lo que llegamos al hospital al mismo momento. Nada más pasar la torre de entrada hay una gran explanada de césped verde y una hilera de casas de piedra todas iguales con chimeneas, puertas y enredaderas y flores. Muchos de los otros edificios alrededor del patio interior que dan forma al Hospital datan de finales del período medieval y Tudor. Estos edificios comprenden el salón medieval, la cocina, un segundo salón y un claustro Tudor. Esas deben ser las casas del hospicio y ahí no pudimos entrar, pero sí donde se conserva la antigua cocina. El hospital fue fundado en 1136 y es el hospital más antiguo del país. La historia cuenta que Henry estaba caminando por Itchen Meadows cuando conoció a una campesina. Ella le rogó que ayudara a las familias locales, que estaban muriendo de hambre. La situación de la niña lo conmovió, pero finalmente continuó con su caminata. Un poco más adelante, junto al río, encontró las ruinas desmoronadas de una casa religiosa, tal vez una destruida en la Guerra. Resolvió en el acto fundar una nueva casa monástica para cuidar a los pobres. Una vez terminó la explicación de la guía bajo la sombra de uno de los edificios (hacía mucho calor al sol) entramos en la iglesia, el pórtico de entrada estaba adornados con guirnaldas de flores porque había habido una boda recientemente. La iglesia es muy bonita, tiene un suelo decorado con azulejos, y en el techo donde las crucerías se pueden ver los colores que lo adornaban. Lo más curioso son los diversos rostros que se van encontrando en los detalles de la iglesia y una cruz tallada en una columna en el pasillo norte que está en ángulo para que la luz de una ventana en el crucero ilumine la cruz el 3 de mayo y el 14 de septiembre. Mientras visitábamos la iglesia tocaron el órgano para nosotros, y luego salimos al jardín con el estanque. El gran árbol que domina el jardín da una agradable sombra, aunque la imagen de las damas y los caballeros paseando alrededores del estanque bajo el sol eran como un cuadro de épocas pasadas. En el estanque hay unos enormes peces y preciosos nenúfares floridos, el jardín es fabuloso. Tras pasear por el jardín visitamos el edificio donde se encuentra la antigua cocina y aquí finalizó la visita, aunque yo me quedé un rato tomando un refresco y un trozo de tarta de la cafetería, todas las tartas eran caseras, trozos grandes y de aspecto fabuloso, lo cierto es que el trozo de tarta glaseada que me cogí estaba delicioso, con una coca-cola fresquita y a la sombra del interior del edificio de piedra fue lo mejor para reponerse de la calurosa tarde, aunque James tomo un té humeantes diciendo que el té era refrescante, solo un inglés diría que un té ardiendo es refrescante.

Visita: Septiembre 2019

Mis imágenes: Winchester 1819 - The Ode "to Autumn" by Keats.

Información para viajar: Pendiente

Keats Walk, Winchester - Inglaterra

Keats Walk

Quedamos en el Guidhall de Winchester para el paseo por el “Keats Walk”, aquí nos encontrábamos caballeros y damas todos ataviados de época regencia inglesa. De camino aquí un policía en coche paró al verde y me saludo “Good morning, looking for Jane Austen? , dije que no, no estaba buscando a Jane Austen porque era al poeta Keats a quien buscábamos y Jane ya había muerto cuando Keats vivió en Winchester. El poeta Keats estuvo viviendo en Winchester y escribió sobre el Hospital de Sant Cross e hizo un poema sobre el otoño en esta zona, aunque el día era más veraniego que otoñal igualmente íbamos a celebrar los doscientos años desde que se escribió ese poema. Aquí nos encontramos todos y nos separamos en dos grupos para hacer el paseo, dado que es una zona residencial y hay bastantes personas paseando (y más con el buen tiempo que hacía). Antes de partir un actor inglés nos recitó el poema "To Autumn" de Keats, verdaderamente expresivo. Dejamos detrás nuestro el Guidhall y caminamos hacia la catedral, se desconoce exactamente donde vivía Keat pero estaba entre la catedral y la calle principal, cerca de la catedral nos paramos en una casa que es un bar y que antiguamente era el cruce de camino de Winchester, y hasta la construcción de la casa había muchos accidentes. Además había otra historia que contar pues este bar es donde un hombre estuvo años llevando un traje de buzo, el motivo era: salvar la catedral de Winchester. En 1906 la catedral corría peligro de derrumbe por la inestabilidad de sus cimientos, y se llegó a la conclusión de que la única forma de lograr evitarlo era sustituir los cimientos de madera por otros de hormigón y ladrillo. Pero surgía un problema con difícil solución: cómo cambiarlos sin tocar la estructura superior. La única posibilidad era acceder desde abajo, es decir, atravesando el pantanoso terreno. Y aquí es donde entra en juego el buzo: William Walker. Este buzo se sumergiría cinco días a la semana durante seis horas bajo la catedral de Winchester para poder conseguir dar acceso a la base de la catedral. Para llevar a cabo su trabajo se vestía cada día en un traje de buzo de la época (1906, por lo que era un traje pesado) que no se quitaba ni siquiera para comer, salvo el casco, por eso el bar junto a la catedral que visitaba tiene en su letrero el casco de un buzo (por eso la cripta de la catedral se inunda en ocasione sy tiene una plataforma para visitarla). De aquí llegamos al frente de la catedral de Winchester donde tuvimos nuestra segunda parada, la catedral de Winchester ya tenía 725 años cuando Keats la visitó. Dos años antes Jane Austen había sido enterrada en el pasillo de la catedral. Por eso le dije al policía que no, que no buscaba a Jane (ya había visto su tumba en la catedral). En el lateral derecho hay unos arcos de piedra por los que pasamos de uno en uno para seguir el camino de Keats y llegar a dos plazs con viviendas y árboles y jardines. Estos son los edificios de Inner Close que incluyen la sala capitular en ruinas, y la escuela de coristas de la catedral. Desde dentro nos llegaban sonidos de piano y el exterior con sus jardines y el aspecto de piedra y madera de sus casas de campiña inglesa nos ofrecían un viaje en el tiempo. Una de las casas está pegada a otra puerta de la ciudad (las puertas y las murallas están tan incluidas en el paisaje que cuesta contarlas por separado), es la Puerta Swithun y el edificio es el Cheyney Court, anteriormente el palacio de justicia del obispo. Cruzamso la puerta que nos lleva a otra más: la Kinsgate, una de las únicas dos puertas originales de la ciudad que se mantienen en pie. Cruzamos la puerta y giramos a la izquierda por College Street hasta una casita amarilla con una placa que recuerda que Jane Austen pasó las últimas semanas de su vida ahí, donde terminó su novela “Persuasión”. Ella murió el 18 de julio de 1817. En esta zona hay tiendas, al regresar por la tarde pro este mismo camino, James me enseñó su librería favorita y el interior del Winchester collegue, todos los colegios tiene horarios de apertura y tickets de pago para visitarlos por dentro.Esta área de Winchester es dominada por el Winchester College, fundado en 1382 por el obispo William de Wykeham. Gire a la derecha hacia College Walk. Al final giramos a la derecha hacia Parking del Winchester College y entramos en un camino de tierra cruzando un pequeño puente de madera y un sauce llorón. Aquí comenzamos el camino más encantador hacia el Hospital de la Santa Cruz. Caminamos por los prados junto a ríos de agua profundamente cristalina, tal y como lo hizo Keats en 1819, junto a la corriente del río Itchen con sus truchas y flores silvestres. A mi vuelta vi a varios pescadores. A un lado está el Winchester collegue y en frente la colina de Santa Catalina, en una zona pantanosa donde vimos vacas pastando, aquí los rincones con los sauces y el río cristalino eran los más encantadores, con razón Keats dijo: “Cruza los prados de St Cross hasta que llegues al río más bello y claro” . Después de un agradable paseo donde el uso de las sombrillas es altamente recomendable, cruzamos Garnier Road para seguir el camino un poco más hasta llegar a una gran explanada verde con unos muros de piedra que rodean el Hospital de St Cross. The Bell Inn en St Cross Road es el pub más cercano y es aquí donde paramos a comer, debido al buen clima algunos comimos en el jardín. En el menú había varios platos y postre, como soy tan rara comiendo solo tome un plato, y menos mal, porque me sirvieron medio pollo asado solo para mí.

Visita: Septiembre 2019

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The Ode "to Autumn" Ball, Winchester - Inglaterra

The Ode "to Autumn" Ball

A las seis y media de la tarde cuando comenzó la recepción del baile en el Guidhall de Winchester para celebrar un Otoño de 1819 en el mismo lugar. En la recepción recibimos bebidas y nos inscribimos para revisar en qué mesa nos tocaba estar para la cena, a mitad del baile. Aquí una mujer encantadora me pregunto de donde venía si estaba sola y se dedicó a presentarme a todo el mundo que ella conocía, además casualmente me tocó cenar en la misma mesa con ella y su marido. El baile comenzó y tuve la oportunidad de bailar todos los bailes menos unos, por si no lo había dicho antes el grupo inglés es encantador y en contra que en el resto de bailes aquí van turnando las parejas porque según ellos un baile de la época era para socializar, si uno baila con la misma pareja entonces no socializa. Me lo pasé muy bien, creo que es el baile donde mejor me lo he pasado, tal vez porque no tenía que hacerlo perfecto y tenía varias oportunidades de bailar. Para la cena cambiamos de sala, el salón tenía altos techos, con las mesas repartidas alrededor del salón. La cena también fue exquisita; estofado de ternera, pastel de pera, etc. Después de cenar aún había algo de tiempo libre antes de regresar al baile y aproveché para ir al baño e ir a la zona de fotografías. Tras las fotografías me encontré con Oxana y comentamos que a ambas nos dolía bastante la cabeza, esas migrañas que se te ponen cuando estas cansando. Ambas habíamos madrugado y volado a Inglaterra en ese mismo día, y ambas habíamos ido de turismo o compras y a la clase de baile, es decir, no habíamos parado en todo el día y es normal que estuviéramos cansadas, no solo es algo físico, también la cabeza pues no es que no pares es que has estado de viaje moviéndote de un lado a otro. Aun así me pidieron bailar y no supe decir que no, me sabe tan malo dado que en los otros baile son es lo usual (vamos, que si vas solo y no conoces a la gente es normal que no bailes) pero en este baile no. Asi que acepté bailar uno tras otros y al final, en los últimos bailes ya no sabía cuál era la derecha o la izquierda, me quedaba en blanco, el cansancio ya podía conmigo, así que con gran dolor decidí sentarme y no aceptar más bailes y entonces todos se reunieron en el escenario con los música porque era el final del baile.

Visita: Septiembre 2019

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Winchester - Inglaterra

Winchester

El fin de semana en Winchester iba a ser intenso, dado que iba a disfrutar los eventos del doscientos aniversario de la Oda al otoño del poeta inglés Keats, pero en mi tiempo libre iba a aprovechar al máximo el tiempo para ver todo lo posible. Salí de Madrid a primera hora de la mañana y llegue a Londres a las diez de la mañana, de aquí podía ir en autobús o tren (con cambio de tren mínimo una vez) hasta Winchester. En Inglaterra es muy fácil ir a muchos sitios en tren sin la lentitud y retrasos que en España donde más vale ir en coche o autobús que en tren. Como era fin de semana y hacia más calor que en España todos los ingleses decidieron ir de dominguero, es decir, había gente por todas partes, algo horroroso si te tienes que desplazar a cualquier sitio. Conseguí llegar al hotel a la una, una hora más tarde de lo previsto asi que deje la maleta en recepción y me fui a ver lo primero de la lista: la catedral. El hotel estaba al lado de la catedral por lo que nada más salir solo tuve que seguir el camino que bordeaba el camposanto de la catedral hasta el frente de la misma, donde está la entrada. Como ya había comentado todos los ingleses decidieron disfrutar del buen tiempo así que el parque que rodea la catedral estaba lleno de padres con niños, bicicletas, cochecitos, gente tirada en el césped tomando el sol, y turistas. La Catedral por fuera es muy parecida a otras que se pueden ver por Inglaterra pero el interior es inmenso, la entrada (sin contratar tours guiadas – no me daba el tiempo -) son nueve libras, pero lo cierto es que se amortiza si recorres hasta el último rincón. Hay guías pero eso solo me iba a retrasar y la catedral pro dentro tiene muchos sitios para visitar, sus vidrieras, su coro, su altar, las tumbas, la cripta, el tesoro, la exposición sobre la catedral, esta es una exposición muy interesante dado que Winchester fue la capital de Inglaterra antes de Londres. Un taxista me dijo que es donde hablan en el inglés más original de Inglaterra, que es un sitio precioso, y que es carísimo vivir ahí, así como que es la primera capital. El tesoro tiene poco para ver, pero es en una de las zonas superiores de la catedral por lo que se puede ver parte de la catedral desde arriba, y digo parte porque como había dicho la catedral es muy grande. Hay rincones con tumbas que tienen papeles avisando que es una tumba porque parecen asientos de madera, o capillas con pinturas en las paredes como las antiguas iglesias. Todos estos rincones los vas descubriendo a medida que se recorre la catedral, no hay que detenerse en un solo pasillo, el lugar es grande y lleno de diferentes estilos. Para bajar a la cripta hay que encontrar una pequeña puerta con aviso de que sobre la plataforma que hay solo puede haber un máximo de nueve personas. Y en medio de la cripta uno puede ver una figura leyenda que representa el silencio, esta vez el suelo estaba seco pero la cripta se suele inundar. Tras salir de la catedral me acerqué al Guidhall, donde se encuentra la oficina de turismo, un edificio mucho más interesante por fuera que por dentro, pero donde tenía clase de baile de dos a tres y media. Aunque no conocía a nadie de los presentes, los Hampshire Regency Dancers son muy sociables y me deje pocos bailes por practicar porque iba cambiando de parejas gracias a ellos. Aunque soy bastante torpe los bailes eran sencillos, y los que más sabían te guiaban y nadie se tomaba a mal que te equivocaras, el único inconveniente del día el calor que hacía en la sala de baile, por suerte había agua fría para ir sobreviviendo. Tras la clase de baile salí del Guidhall y subí por High Street, esta calle es parcialmente peatonal y estaba llena de puestos de comida y artesanía, aquí me compré algo para comer mientras subía pro la calle esquivando inmensos grupos de gente y parándome de vez en cuando para disfrutar de las casitas que rodean toda la calle principal, con diferentes estilos ingleses. Al final de la calle te encuentras con una de las dos torres de guardia del siglo XII de la antigua muralla, girando a la izquierda te encuentras con unas piedras antiguas como en España mostramos las piedras romanas, pero no había ningún cartel que indicara de qué época trataban esas ruinas. Aquí está la entrada al Great Hall de Winchester, en este edificio se conserva la que dicen es la mesa redonda del rey Arturo. Cuando fui a pagar la entrada descubrí que ese fin de semana eran las jornadas de puertas abiertas de Winchester y la entrada era gratis con varios puestos dentro del salón. Dentro del salón se puede ver la mesa colgada en la pared del hall, la mesa original no estaba pintada, el rey Enrique VIII mandó pintarla en 1522. Tampoco estaba colgada de la pared, como en la actualidad. También, no sé si por la jornada de puertas abiertas, se podía visitar el pequeño jardín de estilo medieval que tiene el Great Hall, y el pasillo donde se ven los documentos relacionados con el edificio. Una vez salí del edificio regrese sobre mis pasos para visitar el Westgate museum, que era la torre de guardia que acababa de dejar de lado. De nuevo la entrada era gratis por las jornadas. La torre es un pequeño museo con armaduras, chimenea, techos pintados, un rincón para disfrazarse de la época medieval y hacer fotografías, y unas escaleras a la zona superior de la torre con vistas de toda la calle principal y el pueblo. Cuando subes al tejado y te acercas al muro empiezan a sonar cuervos grabados, aunque entre el sol y que estaba sola, no impactaba mucho. Una vez salí del westgate baje por la misma calle hasta pasar de largo el guidhall, las visitas las había ordenado por orden de prioridad teniendo en cuenta que todo cerraba a las cinco de la tarde. Tas pasar el Guidhall se encuentra la estatua del rey Alfred, y un poco más allá se encuentra el viejo molino de la ciudad. El Molino de Winchester tiene más de 1000 años de antigüedad y está junto a un puente, al otro lado del puente comienza un precioso camino que en días soleados como este es muy apetecible recorrer. El camino recorre la ribera del río que baña la ciudad, las casitas alrededor de ladrillo estaban casi ocultas por la vegetación, frondosos árboles de intenso verde que con el cielo azul despejado le daban un toque de campiña inglesa. El camino se bifurca y seguí la muralla de piedra porque mi destino final era llegar al castillo de Wolvesey de 1110, residencia de los obispos de la catedral antes de la conquista normanda, cuya entrada es gratuita pero que cierra a las cinco de la tarde. Frente al castillo había un camión de helados italianos con una gran fila de cliente, yo con tanta entrada gratuita no tenía suelto suficiente así que esperé al siguiente día en proveerme de un helado, más que apetecible con el intenso calor que había. Para llegar al castillo hay que seguir un camino que deja a un lado la casa palacio actual de los Bishop y al otro un inmenso campo de fútbol. Las ruinas son bastantes amplias lo que dan a entender lo grande que era el castillo en su época original. Una vez visto el castillo podía continuar el camino o volver por había ido, en este caso es lo que hice porque a las seis y media tenía la recepción del baile y había que peinarse y vestirse, y la ropa de época no es fácil de ponerse cuando se la pone una sola. Pero si se continúa este camino se llega a la casa donde murió Jane Austen, otra de las puertas de la ciudad, preciosas antiguas casas y la catedral de nuevo. Esto lo sé porque el camino lo hice el domingo. Como veis, hay bastante que ver y hacer en Winchester.

Visita: Septiembre 2019

Mis imágenes: Reino Unido - Cuaderno Fotografico

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Próximo viaje

Hola,

Todavía queda mucho pero ya tengo mi próximo viaje...

Cinco siglos desde que el 16 de noviembre de 1519 se dio por inaugurada la ciudad de La Habana.

Pues sí, como habréis leído, son estas las cosas que pasan  y no buscamos (Perú, Camino de Santiago, Suiza, etc). Y es que después de comprar los billetes de avión y los hoteles nos enteramos que en noviembre de este año 2019 era el aniversario de la inauguración de La Habana como ciudad.

No he terminado de prepararlo pero tenemos pensado esto:
Dia 1: Salida Madrid- La Habana
Dia 2: La Habana
Dia 3: Las Terrazas: Rancho Curujey, Cafetal Buenaviesta, Río San Juan.
Dia 4: Cienfuegos
Dia 5: Trinidad
Dia 5: San Isidro de los Destiladeros
Dia 6: Parque Natural de Topes: Mirador, Casa del Café, Casa de la Gallega, Sendero ecológico "Centinelas del Rio Melodioso", La Poza del Venado y salto El Rocio.
Dia 7: Parque Natural de Topes: Sendero ecológico "Parque El Nicho", Pocetas de los Enamorados, Poceta de Cristal, Los Tres Deseos.
Dia 8: La Habana: 500 aniversario de su inauguración como ciudad.
Dia 9: Valle de Viñales, Los Jaminez, Cueva del Indio
Dia 10: Cienaga Zapata: criadero de cocodrilos, Laguna del Tesoro, Aldea Taina
Dia 12: Salida La Habana - Madrid
Dia 13: Madrid-Zaragoza

Ir hasta Santiago de Cuba se me iba de presupuesto así que se queda fuera, pero si conseguimos hacer todo lo planeado creo que no está mal el recorrido...ahora a esperar a Noviembre.


Presentación

Curriculum Viajero - Presentación