Plasencia A Plasencia llegamos cuando el sol ya se estaba yendo, subimos lo primero de todo a la ermita de la virgen del puerto, que siempre sale representada mostrando el pecho y dando de mamar al niño Jesús, mientras subíamos en coche pude ver de la ciudad el acueducto de Plasencia (arcos de san Antón), y como por el camino a la ermita iba mucha gente andando y corriendo, aunque lo más singular que vi fueron las piedras que había en la montaña, tenían una forma muy curiosa. Desde lo alto de la ermita se tiene una vista espectacular, así que solo por la vista de Plasencia y el pantano vale la pena la subida. Ya bajando fuimos corriendo a entrar a las murallas de la ciudad, es gratis entrar, subir y pasear por ellas pero nos cerraban a las ocho así que íbamos corriendo de un lado a otro. Luego caminamos hacia la Plaza Mayor y el Palacio Municipal, en uno de los laterales del Ayuntamiento se sitúa la Cárcel Antigua, y presenta una fachada de sillería donde figura un escudo del r...