La Laponia finlandesa en invierno ofrece muchas actividades
que realizar y pocos monumentos que visitar. Una de las actividades que hicimos
fue la pesca en hielo. Era la primera vez para todos por lo que marchamos tras
el guía sobre el helado lago Inari con bastante ilusión que acabó
convirtiéndose en agotamiento.
Empezamos con el proceso de hacer un agujero en el hielo que permita que el sedal llegue al agua. Dado el grosor de la capa de hielo del lago esto nos costó tiempo y esfuerzo por parte de todos. En varias tandas nos dedicamos a hacer un agujero en el hielo con un perforador manual, uno gira y gira en el mismo agujero hasta conseguir llegar al agua. Mientras, otra persona separa con una pala el hielo y la nieve acumulados alrededor del agujero. Como éramos varios cuando uno se cansaba otro tomaba el relevo, por lo que no me imagino esta actividad para uno solo.
Finalmente una vez conseguido el agujero usábamos una pequeñísima caña de pescar del tamaño de una varita y cuyo pequeño hilo caía en el agujero. Dejábamos que siguiera y siguiera cayendo en el agua porque hay que asegurarse que caiga profundo, donde puede haber vida animal. Y luego toca esperar. Por supuesto en toda la tarde ninguno llegamos a pescar nada, pero en esas frías aguas no sé si puede conseguir pescar algo en solo una tarde (llegamos a estar a -30 grados).
Pero fue un entretenimiento original hasta que llegó la noche y pudimos disfrutar de las auroras boreales.
Comentarios
Publicar un comentario
.