Camino de Inari a la Iglesia Pielpajarven Al día siguiente pese a habernos echado a dormir pasadas las dos de la madrugada viendo auroras boreales en el espacioso cielo azul sobre el lago Inari , nos levantamos a las seis de la mañana. La vista desde nuestra habitación con la luz de mañana comenzando a aparecer, junto con las casitas de madera color rojo y la nieve rodeándola, formaban una postal navideña. Bajamos a desayunar las primeras, y para aprovechar, hasta la hora en que íbamos a coger la moto-nieve, salimos fuera. Es bueno que el hotel tenga un termómetro justa saliendo al porche, creo que fue de las cosas más fotografiadas porque todos le hacíamos fotografía a la temperatura, este primer día entre -26 y -22 según tengo registrado. Dimos la vuelta al hotel y bajamos hasta el embarcadero para ver el lago todo helado, cuando intentamos acercarnos a una de las casitas que rodean el lago nos hundimos hasta casi la cintura de la cantidad de nieve que había, así que salimos por
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