Después de comer volvemos al jeep y los caminos de tierra seca por las montañas llegamos a una gran explanada rodeada de montaña seca y un falso anfiteatro construido con las rocas de ahí. El lugar, con sus montañas, parece un desierto con una pequeña caseta donde venden las entradas para los baños de Adonis. Pasando por la caseta comienza una pequeña ascensión de la montaña de tierra adornado por esculturas de los dioses griegos, hasta llegar a una gran escultura dorada de Adonis (uno de los amantes de Afrodita), aquí hay una caseta que es la entrada a los baños, la caseta de madera descubre un bar restaurante, baños y un extraño museo que no es más que una colección de objetos personales recopilados; camas antiguas, fotografías, esculturas, resto de un molino…Y tras el extraño museo te encuentras con tres camino, uno lleva a la cascada alta de los baños, pero estaba todo embarrado y complicado, el segundo camino te lleva a un puente desde donde puedes ver la primera cascada y la laguna profunda de agua verde que forma y la cascada baja de los baños de Adonis. Y volviendo sorbe nuestros pasos en el tercer camino bajas escaleras de madera que dan a las mesas de picnic bajo la sombra de los árboles y en el otro lado unas escaleras que bajan justo frente a la cascada de los baños de Adonis, donde hay un árbol con cuerdas preparado para que la gente las coja y se lance al agua. Cuando llegamos pensaba que mi amiga, que le gustan las aguas de río se bañaría pero ya era por la tarde y el sol se iba marchando así que no se animó, aun así, como nos encontramos con unos uruguayos y venezolanos en el lugar estos sí se metieron a los baños mientras nosotras disfrutábamos de la vista de la pequeña cascada. Este lugar representa el punto en el que surge el contacto entre Adonis y Afrodita y es que la isla tiene rincones sobre la mitología griega en cada rincón. No deja de ser curioso este lugar de baño natural considerando que está rodeado de un desierto, ya que la carretera es pura tierra seca, mi amiga decía que le recordaba el paisaje de Almería y es que no hay que olvidar el gran problema de agua que tienen en la isla. Antes de anochecer salimos de los baños para volver a Pafos dando por terminado un día muy completo.
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