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Cueva de Caco - España

Cueva de Caco 

Del pozo de Aines nos acercamos a la cueva de Caco. Cuando una se va acercando al pueblo puede ver tras la iglesia una montaña con un gran agujero, ese agujero es la cueva de Caco. El lugar está vallado y cerrado, para evitar los famosos botellones y que haya algún accidente, porque dentro en realidad no hay nada, y mucho menos algo de valor. Así que el vallado es por la propia seguridad de la gente. La vista desde abajo está un poco estropeada por la cantidad de escaleras metálicas que llevan hasta el interior de la cueva, bastante elevada del suelo. Tras subir todas las escaleras acabas introduciéndote dentro de la cueva, donde hay una explanada de tierra cubierta por suelo metálico y el techo de la cueva está cubierto por telas, de forma que se evita que los excrementos de los murciélagos caigan sobre los visitantes (pero se pueden ver sobre las telas del techo. Desde la gruta se obtiene, en mi opinión, la mejor de las vistas. Y es la vista del pueblo y de los montes desde lo alto de la gruta. La gruta tienen unas pocas escaleras más por las que se puede acceder a un lateral de la montaña que sale de la gruta y que es como un balcón para ver mucho mejor el pueblo y el paisaje que rodea la zona. La subida se hace sin dificultad, pero la bajada con tantos escalones hay que tomarla con tranquilidad. Hay barandillas donde apoyarse pero los animales no las dejan muy limpias. Cuando llegamos a la explanada el guía nos contó la leyenda del lugar y es que se llama así porque aquí vivió un gigante ladrón llamado Caco. Cuando Hércules y Pierres, que a la sazón habitaban en Tarazona, tuvieron noticia, por la fama que adquirían sus proezas, de que en este punto existía el gran Caco, decidieron ir a visitarle y conocerle. A ésta cueva se dirigieron los visitantes, encontrando a Caco, que les invitó a beber vino en una tinaja de veinticinco cántaros, manejada con una mano a guisa de vaso. Debieron simpatizar los tres personajes, cuando allí se proyectó una cacería al Moncayo, la cual se llevó a efecto. Pero el tiempo provocó que Caco hiciera honor a su nombre robándole el ganado a Hércules y lo escondió en su Cueva de los Fayos. Como Caco era un ladrón desde entonces a los ladrones los llamamos “cacos”. Hércules indignado siguió las huellas que había dejado el ladrón con sus reses. Finalmente Hércules mató a Caco, y encontes tuvo remordimientos por lo que lo enterró ,y del cuerpo del gigante Caco cubierto de piedras surgió el Moncayo.

Visita: Noviembre 2014

Mis imagenes: Pendientes

Información para viajar: Gozarte

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