Recién llegada del camino de Santiago, y tras regresar del trabajo marché a una excursión de un día con Gozarte. En teoría iba a ir con mi hermana pero al final no le fue posible asistir. Aún así no hubo ningún libre, hay lista de espera para estas excursiones. Lo que refleja perfectamente lo bien que están. La excursión consistía en pasar un día alrededor del Moncayo y sus leyendas, que son varias. Dentro de la comarca de Tarazona nos acercamos a nuestra primera parada que es el pozo de los Aines. Hay varias leyendas a su alrededor, incluso la falsa que indica que su nombre viene del pozo de la Ines, algo incorrecto. Hay un camino natural que te lleva hasta un campo de olivos donde, rodeado de vegetación, se encuentra el pozo de aines. Frente al lado donde se encuentra una entrada en la tierra hay unas cuantas placas solares que sirven para alumbrar el lugar de noche y para que el audio guía te cuente la leyenda de la aparición del pozo, cinta que salta cada vez que detecta movimiento dentro de la gruta. El pozo, al estar rodeado de vegetación, desde su alrededor (convenientemente vallado) no permite una vista completa de la profundidades, pero en la tierra se ha cavado un acceso de escaleras hasta una gruta, que tiene un mirador suspendido sobre el pozo, desde donde se tiene un vista magnifica del lugar. El pozo tiene una vegetación diferente al resto del lugar debido a que tiene un microclima propio. Cuando conseguí bajar y situarme en el mirador suspendido (solo pueden seis personas a la vez), pude ver el pozo desde una vista perfecta, los laterales, hacia arriba y hacia abajo, y lo primero que se te pasa por la mente son las fotografías de los zenotes mejicanos. La vegetación que lo cubre, y el agua que se forma en su fondo es muy parecida. El pozo, pese a la leyenda que dice que se creó cuando un converso fue a trabajar en un día festivo y el suelo se abrió a sus pies por decisión de dios, en realidad se creó debido al hundimiento de la cavidad subterránea generada por la disolución de la roca caliza pro el agua subterránea. La visita apenas dura unos minutos pero es un lugar diferente y recomendable de ver, que añadido a otro par de visitar por la comarca hacen que pase medio día sin apenas darte cuenta. Este pozo aparece en la novela “Bendita calamidad” de Miguel Mena, que estaba en el recuerdo de todos pues era la película que estaba rodando cierto actor español que murió en un accidente de tráfico hacia unos meses.
Visita: Noviembre 2014
Mis imagenes: Pendientes
Información para viajar: Gozarte
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